En la escuela aprendemos y trabajamos cómo seducir y principalmente cómo seducirnos a nosotras mismas. Eso es clave y no debemos olvidarlo jamás: el acto de seducir siempre debe empezar por la seguridad y el amor propio, entendiendo que no se trata de seducir a otro renunciando a quien somos sólo por agradar. Pero ¿qué nos indican los gestos del que tenemos delante?

 

Es importante aclarar que cuando hablamos de seducción, a la mayoría nos viene a la mente relacionarlo con todo lo que es entre dos y a un nivel amatorio. Pero no es así ya que dominar y entender la seducción va mucho más allá y se puede aplicar a nuestro entorno laboral, familiar, social y en muchos otros ámbitos.

En la seducción (más allá de los flechazos de interés a primera vista) el acto de comunicar es la clave. Y podemos comunicar de forma verbal (con las palabras que decimos) o de forma no verbal (cómo gesticulamos, cómo nos vestimos, la mirada,…). Sólo con leerlo ya habréis adivinado que la parte no verbal tiene mucho peso. Tanto que en realidad, representa el 90% de todo acto comunicativo.

El estudio del lenguaje no verbal es muy extenso y merecería muchos posts pero cuando estamos “seduciendo” a alguien o a muchas personas (recordemos que no sólo se trata de la seducción amorosa) hay unas señales inequívocas de que quien recibe nuestro mensaje está o no interesado en nosotras. Las emociones tienen una correspondencia en los comportamientos corporales, por lo que podemos saber si la otra persona se está sintiendo contenta, tensa, enfadada o relajada si aprendemos a reconocer estas señales que emite el cuerpo.

El lenguaje no verbal puede ser consciente o inconsciente. Es decir, ciertas posiciones (como hacia dónde apuntan los pies o las manos) no las controlamos pero se dan siempre y otras, como el vestir o una sonrisa a propósito, sí las realizamos por una decisión consciente. Dicho esto también hay que tener en cuenta que las personas tenemos una personalidad y unos gestos propios y que no tienen por qué indicar expresamente lo que en teoría dicen. Por eso, es importante saber si ciertos gestos son significativos o no en alguien determinado. Por ejemplo: bajar la mirada hacia el suelo al hablar es indicativo de falta de seguridad, pero hay personas seguras que siempre miran al suelo (aunque no sea lo habitual).

Pues aquí van algunos tips de lenguaje no verbal (esta vez nos hemos centrado en los hombres) que podéis analizar vosotras mismas:

  • Un hombre que trata de llamar la atención riendo, bromeando o haciendo movimientos exagerados en un grupo implica que quiere que se percaten de su presencia.
  • Si se pasa la mano por su cabello para tocarlo, arreglarlo, etc. mientras está contigo es señal de que está un poco inquieto en el sentido positivo, le gusta la persona que tiene delante.
    Si se inclina ligeramente hacia ti: es la clave más sencilla de leer. Si lo hace es porque quiere acercarse y cerrar el círculo entre los dos, aproximarse a ti.
  • Cuando un hombre pone las manos o los pulgares apoyados en el cinturón, en las caderas o en sus bolsillos señalando (lo hacen de forma inconsciente) a su entrepierna, es señal de interés activo. Incluso pueden tener un movimiento de balanceo.
  • Si toma una respiración profunda inconscientemente al estar conversando. Es un acto que desde una perspectiva evolutiva significa que está intentando atraerte.
  • Cuando un hombre siente interés por otra persona hace gestos de acicalarse: se arregla alguna parte de su vestimenta, se pone bien la corbata, se arregla el cuello
    de la camisa, se pone bien la camiseta, los calcetines, etc.
  • Si toca mucho su cara mientras te mira (barbilla, mejillas, cejas…) inevitablemente
    está interesado en ti.
  • Si cruza los brazos (a no ser que tenga frío) está mostrando distancia o defensa.
  • Te señala con los pies: los pies tienden a señalar donde su mente y corazón quieren ir. Si quieres comprobarlo, tócalo en su brazo o en el hombro y observa si cambia la posición de sus pies.
  • Avanza un pie hacia ti: acercar un pie hacia los tuyos, incluso invadiendo el espacio entre ellos, es una trampa; que hace para disminuir el espacio entre ambos, cuando no puede hacerlo tan evidente.
  • Si uno de sus pies está listo para salir caminando, especialmente el izquierdo, que lo controla el honesto hemisferio derecho, parece que cobra vida propia y se separa hacia un lado levantando la punta, es la señal más fuerte de que quiere irse de allí.
  • Si con el ángulo de su pelvis está señalándote a ti o se acerca, o si se sienta con las piernas abiertas por lo general (no olvidemos la parte personal y educacional) indica que tiene interés en ti.
  • Si pone su mano en tu codo o en la parte baja de tu espalda se está mostrando protector e interesado, quiere estar cerca de ti y cerrar espacios mutuos.
  • Si su voz se hace más profunda y amable: está interesado en ti.
  • Si se inclina hacia ti (no en una discoteca dónde no se escucha nada) está dejando ver las ganas que tiene de ti. Si está derecho, incluso rígido: no es una posición muy cómoda y, aunque esté sonriendo y te esté prestando toda su atención, su actitud es sólo amistosa.
  • Si extiende su mano y te apunta con las puntas de los dedos con gestos rápidos o lentos, está buscando acercarse para tocarte.
  • Si mantiene su mano alejada y con los dedos apunta a otra dirección quiere decir que no siente real interés por ti, de la misma forma que si sus dedos se mantienen cerrados o apuntando hacia sí mismo.
  • Si rompe el contacto visual contigo continuamente en la conversación o se está aburriendo o está distraído.
  • Si tiene una ligera sonrisa continua en la cara está claramente pendiente de ti (aunque algunas personalidades muy tímidas como hemos dicho podrían no hacerlo).
  • Si deja de sonreír y la mirada está en otro lado no tiene interés en lo que dices o en ti.

La verdad es que podríamos analizar muchos más factores incluso cambios físicos que se dan cuando la gente está interesada en alguien. Lo importante es saber leer puntos claves y guiarse por la propia intuición que normalmente es una gran brújula.

De la misma forma, la personalidad influye mucho y más adelante, en otro post hablaremos de los tipos de personalidad seductoras.

Y vosotras, ¿Veis siempre claro cuando alguien está interesado?