Descubrir la danza me ha aportado una forma de vida diferente. Gracias a ella, he conocido una gran variedad de personas del mundo de la danza desde muy temprana edad.

Hasta los 18 años disfrutaba de la danza (de los pasos nuevos que aprendía con Marina) bailando sola en mi habitación por más de que mis profesoras me empujaran a bailar en restaurantes.

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Fotos del 2006, ensayando en un teatro para una actuación en Ullastrell

Llego un momento en que viajé al Cairo, recibí clases de profesores nativos y descubrí la ciudad, su gente, su cultura y su lengua.

Al volver a Barcelona (2009) empecé a estudiar árabe y resolvía mis dudas en un restaurante egipcio, donde me dedicaban (y me dedican) su tiempo con mucho interés. Y sin darme cuenta me encontré aprendiendo árabe y bailando simultaneamente los fines de semana.

Actualmente, he tomado la decisión de vivir una temporada larga en El Cairo, donde tengo un piso que alquilo habitaciones a bailarinas, estudiantes de árabe, turistas, etc.

Quizás se debe a mi estilo de baile y expresividad la razón por la que me han ofrecido trabajar como bailarina en el Cairo acompañada por una orquesta y cantante.

Teniendo muy presente siempre que lo enriquecedor del país es su gente (su hospitalidad, su acogida). A pesar de su diferente visión hacia la danza oriental.

Foto: bailando con Randa Kamel, una súper estrella del Cairo.

Si os interesara alquilar el piso en el Cairo, el contacto con migo es en: disfrutaladanza@hotmail.com