Originario del Japón, hubo un tiempo en el que el abanico jugó un importantísimo papel en la relaciones humanas y más concretamente en el flirteo entre las mujeres y los hombres, donde se expresaban deseos, sentimientos o rechazos por medio de este complemento.
Llegó a tener todo un lenguaje lleno de significado a su alrededor. Aquí van algunos de sus significados…

1. Abanicarse rápidamente. Te amo con intensidad.

2. Abanicarse lentamente. Abanicarse de forma pausada, significa soy una señora casada y me eres indiferente. También si se abre y cierra muy despacio significa esto.

3. Cerrar despacio. Este cierre significa un «Sí». Si se abre y cierra rápidamente significa, «Cuidado, estoy comprometida».

4. Cerrar rápido. Cerrarlo de forma rápida y airada significa un «No».

5. Caer abanico. Dejar caer el abanico significa: te pertenezco.

6. Levantar los cabellos. Si levanta los cabellos o se mueve el flequillo con el abanico significa que piensa en ti, que no te olvida.

7. Contar varillas. Si cuenta la varillas del abanico o pasa los dedos por ellas quiere decir que quiere hablar con nosotros.

8. Cubrirse del sol. Significa que eres feo, que no la gustas.

9. Apoyarlo sobre la mejilla. Si es sobre la mejilla derecha significa «Si». Sobre la mejilla izquierda es «No».

10. Prestar el abanico. Si presta el abanico a su acompañante, malos presagios. Si se lo da a su madre, quiere decir «Te despido, se acabó».

11. Dar un golpe. Un golpe con el abanico sobre un objeto, significa impaciencia.

12. Sujetar con las dos manos. Si sujeta el abanico abierto con las dos manos, significa «es mejor que me olvides».

13. Contar o abrir cierto número de varillas. La hora para quedar en una cita, en función del número de varillas abiertas o «tocadas».

14. Cubrirse los ojos. Con el abanico abierto, significa «Te quiero». Si nos cubre el rostro puede significar «Cuidado, nos vigilan.

15. Pasarlo por los ojos. Si se pasa el abanico por los ojos significa, Lo siento. Si cierra el abanico tocándose los ojos quiere decir, «Cuando te puedo ver».

16. Abrir abanico y mostrarlo. Significa, «Puedes esperarme».

17. Cubrir la cara. Cubrir la cara con el abanico abierto, significa: Sí­gueme cuando me vaya.

18. A medio abrir. Apoyar el abanico a medio abrir sobre los labios quiere decir «Puede besarme».

19. Apoyar los labios. Si apoya los labios sobre el abanico o sus padrones, significa desconfianza, «No me fí­o».

20. Pasarlo por la mejilla. Significa, «Soy casada».

21. Deslizarlo sobre los ojos. Significa: «Vete, por favor».

22.Mano izquierda. Llevarlo en la mano izquierda quiere decir: «Deseo conocerte». Moverlo con la mano izquierda significa: «Nos observan».

23. Mano derecha. Llevarlo o moverlo con la mano derecha, significa: «Amo a otro».

24. Pasarlo de una mano a otra. Significa, «Estás flirteando con otra» o «Eres un atrevido».

25. Girar con la mano derecha. Significa: «No me gustas».

26. Tocar la palma de la mano. Quiere decir: «Estoy pensando si te quiero».

27. Sobre el corazón. Apoyar el abanico abierto sobre el corazón o el pecho, quiere decir: «Te amo» o «Sufro por tu amor».

28. Darse en la mano izquierda. Darse un golpe con el abanico cerrado en la mano izquierda significa «Ámame».

29. Mirar dibujos. Mirar los dibujos del abanico, quiere decir: «Me gustas mucho».

30. Bajarlo a la altura del pecho. Significa: «Podemos ser amigos». También dejarlo colgado, quiere decir «Seremos amigos».

31. Cerrarlo sobre la mano izquierda. Quiere decir: «Me casaré contigo».

32. Saldré. Ponerse en el balcón con el abanico abierto o salir al balcón abanicándose. También entrar en el salón abanicándose.

33. No saldré. Dejarse el abanico cerrado en el balcón, salir al balcón con el abanico cerrado, o entrar en el salón con el abanico cerrado.

34. Arrojar el abanico. Quiere decir: «Te odio». o «Adiós, se acabó».

35. Presentarlo cerrado. Significa: «¿Me quieres?».

36. Sobre la oreja. La izquierda «Déjame en paz no quiero saber nada de ti». La derecha «No reveles nuestro secreto».

Y para terminar, un soneto de Salvador Rueda, dedicado a este bello instrumento:

FORMANDO SERPENT͍SIMO ENGRANAJE,
CATORCE VERSOS SON UNA POESIA,
Y FORMANDO TU LEVE CELOS͍A,
CATORCE ESPADAS SON TU VARILLAJE.

DEL SONETO EN EL RíTMICO LENGUAJE
PRISIONERA TE DEJO EL ALMA MIA
COMO DEJÓ“ EL PINTOR SU FANTASIA
EN TU VITELA DE IDEAL ENCAJE.

DEL SONETO LAS LÁNEAS PRIMOROSAS,
COMO CATORCE RAYAS LUMINOSAS
VAN A UNA IDEA A SUCUMBIR CLAVADAS.
Y DE MANERA IGUAL, BELLO ABANICO,
DE TUS VARILLAS EL MANOJO RICO
CLAVA EN MI PECHO SUS CATORCE ESPADAS

Ya sabeis….cuidadín cuando os abaniqueis 😉

Si te ha servido o lo has encontrado útil, o simplemente te a gustado, salúdame por los comentarios. Lo agradezco más de lo que piensas, ;) Gracias.
Marina Salvador